Soy un chico abierto a tod@s, me encantan las caricias suaves sin límite y el sexo con mujeres y hombres por igual. Practico senderismo desnudo por el monte y la naturaleza. Me gusta los masajes, estar desnudo al aire libre, las situaciones picantes en la naturaleza y bosques de día y de noche. Soy fotógrafo de profesión, busco gente de Madrid deshibida con los mismos gustos, hobres y mujeres al ser posible todos bix. Si os gusta la idea escribirme a (andres . graels @ gmx . com)

La mujer de Esteban se preocupaba por el fetiche de su esposo, pues pasaba horas mirando culonas fornicando. Una tarde que la esposa no se encontraba, el esposo adicto a los culos contrató dos prostitutas. Ambas eran salvadoreñas, se trataba de unas morenas bien bronceadas con muslos musculosos y colas abultadas. Así pues, las dos culonas latinas tocaron a la puerta, mientras esperaban se acomodan la tanga y el sostén. Esteban abrió la puerta y las hizo pasa; cuando las nalgonas subían la escalera, él golpeaba sus traseros. Cuando llegaron a la habitación, el marido infiel se colocó de rodillas.

Ambas perras acercaron sus retaguardias al rostro del señor, que restregaba su cara contra los apestosos culos. Ya con la sangre en la cabeza, Esteban les arrancó los shorts de mezclilla. Estos estaban muy apretados a causa de las voluptuosas curvas. Ahora bien, las morenas se lanzaron a la cama. Se pusieron de rodillas sobre el filo del mueble y reposaron sus pechos contra la sábana. El maduro cachondo tomó una de las culonas entre sus manos y clavó la polla en el trasero de durazno. Después tomó a la otra puta y también le perforó el ano. Las culoncitas gritaban: ¡fóllanos duro por el culo, Esteban!. Más porno de colegialas en el blog de tiempo y docencia